Cuando piensas en el tiempo que ha pasado de
las cosas que ya has hecho te entristeces ya que ¡ha pasado mucho tiempo desde
que hicimos casi cualquier cosa! y esto es lo que nos pasó con Burgos. Más de 20
años desde que estuvimos visitando esta ciudad, así que era hora de volver y de
paso hacer algunas visitas por la provincia.
Llegamos
por la tarde. Cogimos nuestra habitación en el Hotel Sercotel Corona de Castilla. Céntrico, a solo un paso de todo, tranquilo y confortable.
Dimos una vuelta ya de noche, cena en la
plaza Mayor y a dormir que el día siguiente lo queríamos aprovechar a tope
Habíamos comprado las entradas a la Catedral
por internet pensando en que nos ahorraríamos colas. Una pena porque tampoco había una gran cola y esto nos impidió
el comprar un bono que incluye la visita de las principales iglesias de la
ciudad y la catedral y que solo costaba 1 euro más de lo que nos había costado
la entrada de "solo" catedral.
Bueno, pues como teníamos tiempo antes de
nuestra visita a la catedral, aparte de darle la vuelta, nos fuimos a visitar
alguna de estas iglesias. Y la primera fue Santa Gadea.
Esta iglesia es importante ya que
en ella tuvo lugar la Jura de Santa Gadea, cuando El Cid Campeador hizo jurar a
el rey Alfonso VI "El Bravo" que no había tomado parte en el
asesinato de su hermano el rey de Castilla, quien fue asesinado mientras
sitiaba Zamora.
Y de Santa Gadea a la iglesia de
San Esteban.
En esta iglesia ya no se celebran
misas y actualmente es el Museo del Retablo.
La colección nos pareció
interesantísima, merece la pena la entrada.
La iglesia tampoco desmerece, de
hecho está declarada monumento nacional.
Y aun nos daba tiempo hacer la
subida al Castillo y contemplar las vistas de toda la ciudad.
Se nos hacía la hora de nuestra visita a la
Catedral, sin duda el plato fuerte de nuestra visita a Burgos, así que bajamos
al centro y pasamos a recoger nuestras audio guías.
Si no es la más bonita de España es sin duda
una de las que más. Una maravilla desde que entras hasta el momento de la
salida, con miles de rincones, salar, capillas y techos que te dejan con la
boca abierta.
Una de las primeras cosas que sorprenden es
el Cimborrio. Da ganas de tener alas para acercarte y verlo mejor.
Aunque con la audio guía te empapas de
muchísima información, historia y curiosidades sobre todos y cada uno de los
detalles importantes de la catedral, a estas alturas me quedo solo con la
belleza que resguarda este edificio. Mi memoria no da para más.
Otro de los rincones más importantes es la
bellísima escalera renacentista.
O la sillería del coro realizada en nogal.
Parece ser que aquí en la catedral está
enterrado el Cid y Doña Jimena, pero estas tumbas son las de los condestables Pedro Fernández de Velasco y Mencía de Mendoza
Aun nos daba tiempo antes de comer de ver
otro de las templos góticos importantes de Burgos. La iglesia de San Gil
Comimos de maravilla en la Plaza Mayor y nos
fuimos a buscar La Casa del Cordón
Es conocida por la Casa del Cordón, pero en
realidad es el palacio de los Condestables de Castilla.
Aquí se reunieron los reyes católicos con Cristóbal
Colón cuando volvió por segunda vez de sus aventuras descubridoras...un poco para echarle la
bronca ya que no les habían hablado muy bien de lo que el hombre estaba haciendo
por las indias.
El nombre de la Casa del cordón se lo dieron
por un cordón esculpido en la puerta principal. El cordón o cadenas significaba
que en esa casa había dormido un rey.
Y con la luz que da el sol de después de
comer nos acercamos a la Plaza Mayor a hacer algunas fotos
Y como llevábamos varias comilonas seguidas
decidimos que a visitar La Cartuja de Miraflores íbamos andando...que no nos
iba a ir nada mal.
El paseo mereció mucho la pena..Saboreamos un
poco del otoño y perdimos algunas calorías.
Y en nada nos plantamos en la Cartuja de Miraflores. Otra
de las maravillas de Burgos.
Un monasterio de Cartujos
en su interior se encuentra el Sepulcro de Juan II e Isabel de Portugal. Una auténtica maravilla.
El retablo no tiene desperdicio
Impresionante la Cartuja. Recordábamos que
era bonita pero el volver a verla de nuevo nos sorprendió como el primer día.
de regreso al centro y después de otros 3 Km
de caminata fuimos a parar a San Lesmes
en la plaza de San Juan
Antes de entrar no pude evitar hacerme una
foto con los Gigantillos
Como no hay iglesia en Burgos que se precie sin unos sepulcros... esta también tiene los suyos.Un refresco para continuar y directos a nuestra última visita del día. El Museo de la Evolución
Agotadísimos nos fuimos a cenar y después
directos al hotel a descansar. habíamos aprovechado el día al máximo y teníamos
que recuperar fuerzas para al día siguiente seguir haciéndolo.
Después de un buen desayuno cogimos el coche
y nos fuimos al Monasterio de las huelgas. No nos lo queríamos perder y la siguiente noche ya la íbamos hacer en otro lado.
De nuevo los recuerdos nos llegaron al
acercarnos a este edificio y su entorno. El barrio casi circular que rodea el
monasterio.
Este monasterio de monjas no se puede visitar
al completo ya que aún quedan algunas que viven aquí
Y aquí terminábamos nuestra visita a la
ciudad. Nos íbamos a conocer otros pueblos y lugares de la provincia.
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