Myanmar 2015 - Yangón.

Después de un cansadísimo viaje con varias escalas y con múltiples chequeos, revisiones de equipajes y hasta pasos por inmigración en países donde no íbamos a quedarnos...llegamos a Yangón.

 

Estábamos agotados pero con ganas de empezar a descubrir este país.

Nuestro hotel Taw Win garden estuvo genial y con una decoración muy nacional.


 
 Después de un pequeño descanso, nos fuimos a realizar nuestra primera visita.

La casa de Aung San padre de la premio Nobel Aung San Suu Kyi.

 Este hombre ha sido muy importante para este país ya que fue el principal promotor del movimiento que terminó con la soberanía británica y acabó con la independencia de Myanmar, entonces llamada Birmania.

Y por fin nuestra primera pagoda. Los nombres de las pagoda son complicados e imposibles de recordar para mi. A esta le llamo la pagoda del arbol ya que en su interior hay 4 arboles que separan las paredes circulares que alojan al Buda.

Históricamente no es una pagoda importante. Pero es espectacular por muchas razones. Llamativa por sus colores, los arboles integrados en la estructura y además....que fue la primera y todo te llama la atención.

 Y como no empezamos a realizar todos aquellos rituales que te ayudan a tener suerte, o a alejar los problemas.

 Uno de los rituales consiste en tocar por tres veces la campana. Y otro buscar el Buda del día de la semana en el que naciste y bañarlo con tantos vasos de agua como años tienes.....siempre pensando en el problema que quieres que desaparezca.

 Antes del atardecer empezó a llegar gente que acuden a los templos para limpiarlos. Ofrecen su trabajo para ganar Karma.

 Y de esta interesantísima pagoda fuimos a la que es sin duda la más importante de Yangon y seguramente del país.
 Swedagon

Al ser un día festivo, estaba lleno de Myanmars (el gentilicio del país es igual que el nombre)

muchísimo pan de oro, Budas e imágenes a las que venerar. Te surge la duda de como eligen ya que hay muchiiiisiiimas.


En los templos hay que entrar descalzo y no están precisamente limpios...por este motivo se gastan mucho unas toallitas húmedas que venden a la salida para limpiarte las plantas de los pies. No está permitido tampoco ir con calcetines.


Nos encontramos una de las tribus religiosas.



Nos podíamos haber quedado allí un día entero....es un lugar impresionante, comparado al palacio real de Bangkok.





 Antes de ir a cenar paramos en el lago para disfrutar de la vista...cena típica (riquísima) y a la cama a descansar después de un primer día genial.