jueves, 9 de febrero de 2017

Amsterdan 2017


Llegamos por la noche a Amsterdan, fuimos directos al hotel y no tardamos ni 10 minutos en dejar las maletas y salir a dar una vuelta por el centro de la ciudad.

Nuestro hotel Ibis centre stopera cumplió todas las expectativas, céntrico y bastante confortable y sobre todo algo muy de agradecer...silencioso.
Habíamos cenado en el avión (una merienda cena porque no eran ni las 18:00h) así que en lugar de cenar buscamos un sitio para tomar algún dulce.
A la mañana siguiente nos levantamos temprano. Queríamos aprovechar los días que estábamos en esta preciosa ciudad y hacer lo que no hicimos hace 16 años cuando estuvimos aquí.
Habíamos reservado una visita a la ciudad en Get your guide, son gratuitas y cuando termina das la propina que quieras. Ya lo  habíamos hecho en otras ciudades y la verdad es que está genial.
                       Pasaje comercial
 3 horas de caminata y explicaciones que nos hicieron adentrarnos un poco más en la historia y costumbres de esta ciudad y entender ciertas cosas como porqué las casas están ladeadas o inclinadas hacia delante
El guía, un colombiano, hizo un gran trabajo
                                                  Barrio judío
Encontramos donde comimos hace 16 años. No nos acordábamos pero al ver la casa negra a orillas del canal vino inmediatamente a nuestra memoria este sitio.
Entramos al curioso barrio de Bejijnhof, un remanso de tranquilidad en medio de la ciudad.
allí se encuentra la Iglesia clandestina y la casa más antigua de la ciudad.
la visita empezó en la plaza Damn y terminó cerca de la casa Anna Frank
Nos vino genial ya que habíamos reservado la entrada para visitar la casa de Anna Frank a las 2:45h y de esta forma podíamos comer en los alrededores tranquilamente después del tour.
antes entramos a la Westermarkt
y después comimos el plato típico holandés, el Stampare
Puré de patatas con una gran albóndiga de carne y salsa.
En el Museo de la ciudad hay una alfombra representando todos los países del mundo con un gran Goliat al fondo y en la salida un representación de como se identificaban las calles antes de que la gente supiera leer.
Después de la casa de Anna Frank nos fuimos hacia el Museo Vangogh ya que habíamos comprado las entradas para esta misma tarde. Los viernes cierran a las 22:00h lo que nos permitía aprovechar el día aun más si cabe
El barrio de los museos es monumental y es donde se encuentra el famoso "I amsterdan"
Después del Museo Vangogh nos volvimos a nuestro barrio buscando un restaurante donde cenar algo. Encontramos el que buscábamos justo en frente del botánico pero cuando entramos nos agobió el escándalo que había y finalmente nos fuimos a cenar al hotel...donde por cierto cenamos bastante bien.
Una mañana más y un paseo hasta el Rijks Museum...primera parada del día.
Bueno alguna parada en el camino para hacer fotos si que hicimos y es que me parece tan curiosa la arquitectura de esta ciudad que me quedo encandilado con cualquier rincón
El edificio del museo es bastante llamativo y avisa de lo enorme que es la colección.
Gracias a que habíamos comprado las entradas nos ahorramos la cola, que aunque a estas horas y en febrero no es una barbaridad de larga si que habíamos leído que puede llegar a ser de varias horas.
el museo es enorme y tiene obras importantes que no hay que perderse...también tiene una biblioteca de 2 plantas que se puede visitar
Sin duda la obra más importante es "La guardia de noche" de Rembrandt.
La Lechera de Vermeer (el pintor de "La joven de la perla") es otra de las obras importantes del museo.
La planta de arriba es de arte contemporáneo y también hay un anexo de arte oriental


Finalmente pasamos más horas de las que habíamos planeado viendo el museo y salimos a las 15:30h hambrientos pero rebosando arte....

y directamente después de comer algo nos fuimos la Iglesia vieja que se encuentra en el mismo barrio rojo.

Es increíble que en medio del barrio más liberal del mundo se encuentre esta iglesia
En cualquier caso ahora funciona como museo y dentro han montado un elevador para poder verla desde un ángulo distinto del que habitualmente ves las iglesias o catedrales.
lo único malo es que subes de uno en uno pero por suerte no había casi nadie visitando la iglesia.
Aún nos dio tiempo de entrar en otra iglesia (no recuerdo el nombre). y de hacer el paseito en barco por los canales...que además nos vino bien ya que justo en ese momento se puso a llover.
último día en Amsterdan. En la plaza Rembrandt está una representación de La guardia de noche.
Fuimos al famoso Mercado de flores que se encuentra en barcazas sobre un canal.
Aunque no te das cuenta cuando estás en las tiendas de que estas sobre el canal.
Nos quedaban unas horas antes de coger nuestro tren para ir al aeropuerto, así que aun nos daba tiempo para ver otro de los museos que teníamos en mente antes de venir a Amsterdan. La casa Museo de Rembrandt
Después de pasar por todas las salas de la casa y por el que fue su estudio se llega a una sala superior donde se exponen algunas obras contemporáneas que nos gustaron bastante
                                                           Mi favorita

Y se acabó nuestro tiempo, no se si volveremos a tardar 16 años en volver a esta ciudad o quizá ya nunca volveremos pero sin duda es una ciudad a la que se puede volver una y otra vez y siempre descubres sitios nuevos e interesantes.