lunes, 23 de septiembre de 2013

Madagascar 2013 - Ifaty



Otro maravilloso lugar con otro fantástico hotel, el hotel Les Dunes d'Ifaty, una cabañita para nosotros con vistas a la playa






desde nuestro porche veíamos como los pescadores volvían de su día de trabajo al atardecer.




un lugar paradisiaco en el que no íbamos a desaprovechar ni un minuto de nuestras vacaciones



primero bajada a la playa para situarnos y para realizar el primer contacto con los lugareños que enseguida se acercaron para vendernos los objetos que ellos mismos fabrican



primer atardecer en la playa de Ifaty





Un grupo de niños con mucha gana de fiesta nos sorprenden con bailes, se lo pasan pipa y consiguen que centremos nuestra atención en ellos en lugar de en el atardecer





por la mañana nos vamos a ver la barrera de coral en un de las barcas típicas que son usadas para la pesca.




agua transparente, se puede ver el fondo sin ningún problema






un paseo alucinante que decidimos repetir otro día para hacer snorkel



de regreso a la playa nos encontramos a nuestras amigas que se dejan fotografiar para que podamos recordar el arte que tienen para maquillarse.



este maquillaje lo usan para protegerse del sol pero las más jóvenes hacen virguerías sin preocuparse tanto de la función original de esta crema.


enfrente del hotel y mientras comíamos empezaban a llegar las mujeres de los pescadores para vender el pescado recién traído por sus maridos.




volvimos a la habitación y encontramos un lagarto que se había convertido en vecino y que nos aseguraba una noche sin mosquitos



por la tarde nos fuimos subidos en una carreta tirada por cebús a la reserva de Reinala



imprescindible ya que es un lugar lleno de baobabs y la mejor opción para verlos en cantidad
de todos los tamaños y formas,



algunos increíblemente anchos,







el más ancho necesita de 12 personas cogidas de las manos para poder rodearlo







nuevo atardecer tomando un coctel (no se puede pedir más)




al llegar a nuestra habitación nos encontramos unas cabras haciendo de las suyas (no sabes que te vas a encontrar cada vez)





Al día siguiente nos fuimos a hacer snorkel y bien tempranito nuestros guías del día anterior al que ya contrataríamos todas las excursiones un poco de extranjis, salieron a pescarnos unas langostas para la comida...se me cae la baba..



el snorkel una autentica pasada, parecía que no íbamos a ver mucho y la variedad de peces y corales era interminable

















el agua un pelín fría pero como está tan alucinado con el espectáculo ni te das cuenta












hasta medusas vimos (creo que serán medusas) pero estas totalmente diferentes a las que vemos en nuestro Mediterráneo.




y a comer a la playa,




desmontaron la vela de la embarcación para que hiciera las funciones de mantel, cocinaron las langostas y cigalas al fuego sobre la arena y a hartarnos






lo curiosos es que a N que no le gusta el marisco le iban a hacer pollo pero se lo cobraban al mismo precio que a mí las langostas ya que las langostas les salían gratis (están en el mar) y el pollo lo tenían que matar para ella, finalmente le hicieron cebú que pollo podemos comer cualquier día.




por la tarde nos fuimos al pueblo para ver la reserva de tortugas



muchas tortugas pero todas iguales (de diferentes tamaños) y el guía del parque parecía que se nos iba a dormir en cualquier momento.











En definitiva lo mejor el paseo en cebús por el pueblo



paramos para ver un partido de futbol local....parecía emocionante pero no aguantamos más de 5 minutos.



coctel y atardecer y enseguida nuestro grupo de amigos vino con la ilusión de que los grabásemos en sus bailes y los fotografiásemos y después poder verlo todo y partirse de risa








Un nuevo día y esta vez queríamos visitar el pueblo de pescadores que da nombre a la zona Ifaty.



descubrimos que nuestro improvisado guía es un cantante famoso y que ha llenado estadios en Antananaribo




la gente le cantaba sus canciones cuando lo veía pasar. El pueblo nos pareció maravilloso



con muchos niños jugando en la playa y por sus calle, muchas mujeres pintadas vendiendo cualquier cosa




Delimitan las viviendas familiares por medio de cañas clavadas en el suelo



la escuela estaba cerrada con unas maderas en la puerta pero pudimos echar un vistazo



los críos ya juegan a ser sus padres anticipándose a un futuro no muy lejano



en definitiva un pueblo pesquero que aún no ha sido enturbiado por el turismo y que en muy pocos sitios del mundo puedes ver.


nos quedaba muy poco tiempo ya de estas maravillosas vacaciones y después de una mañana interesantísima en Ifaty apetecía un baño en la piscina


después una comida tranquila viendo la playa



quise captar el momento que me pareció totalmente mágico.



por la tarde decidí darme un baño en la playa antes de darnos un largo paseo por la costa para ver que teníamos al otro lado




mucha vida más allá de nuestra playa, sobre todo pescadores y artesanos haciendo o reparando canoas.




Vimos atardecer esta vez desde nuestro porche y con una botella de vino francés



estrellas y la última cena en el hotel ya que al día siguiente nos vamos hacia Tulear para coger el avión a Tana.





De nuevo el paseo (esta vez de regreso a Tulear) no tiene desperdicio y nuestro conductor que no paraba de hablar pasando del francés al inglés, nos explicó muchas cosas de su tierra.